viernes, 27 de noviembre de 2009

sábado, 21 de noviembre de 2009

Azzurro



Azzurro.
Adriano Celentano.


Espero el verano todo el año y de repente aquí está.
Ella se ha marchado a la playa y estoy solo aquí en la ciudad.
Siento un ruido sobre el techo un avión que se va

(ESTRIBILLO)
Azul, la tarde está muy azul y se me hace larga.
Me doy cuenta de que no tengo remedio sin ti
Y ahora cogí el tren por los pelos
para ir, hacia ti,
Pero el tren de mis deseos en mi pensamiento va al revés.

Se parece a cuando estaba en el seminario
hacía tanto sol, hace muchos años.
Aquellos domingos en soledad
paseando por el campo
Hoy me enfado más que entonces,
pero ni siquiera tengo un cura para charlar.

(ESTRIBILLO)

Busco algo de África en el jardín,
entre el laurel y el baobab,
como hacía cuando era niño,
pero aquí hay gente, y ya no se puede,
están regando tus rosas,
no está el león, quién sabe dónde está.

(ESTRIBILLO)


jueves, 12 de noviembre de 2009

Medio Mes

No puedo evitar sentirme melancólica a mitad de mes. Supongo que funciona dentro del intrigulis que significa mantener mi estatus de mujer. Hecho de menos cosas que hacía las mitades del mes pasado y de todos los anteriores también. Recuerdo a personas que estuvieron a mi lado aguantando estoicas como rocas perdidas en un espeso mar de bruma. Gente que estaba a mi lado a pesar de que nunca se lo pedí, y que se que volvería estarlo sin dudar una y otra vez. Sería mágico que las mañanas de mitad de mes fueran preciosas, las más bonitas que cupiesen en la mente de cualquiera, pero son de un color cetrino que agobia hasta al mas pintao, y las noches son peores todavía. Se que hay quien piensa en mi igual que yo pienso en quien. Me gustaría ser la mujer serena y a veces fuerte que parezco para estar con ellos, y más que decirles muchas cosas me gustaría que me las dijesen ellos a mí. Recuerdo las noches de Donuts y Diamantes.
Leo en los ojos de los demás palabras de amor que no son para mí. Tengo preguntas sobre las futuras mitades de meses que vendrán. Las guardo en el relicario que es mi boca sellada... en las mitades de mes veo tantos relicarios cerrados a cal y canto que me gustaría emborracharme hasta poder gritar "Hasta aquí llego el agua!!"
Por suerte también tengo muy presente cosas oscuras que pendían de mis melenas, y que por fortuna dejé atrás después de recomponerme ante el espejo de mi vida. Espejo velado que me devuelve media sonrisa esperanzada. Ahora tengo más ganas de todo que las mitades de meses anteriores. Quizá dure, quizá termine mañana. Rara vez esta saciada el alma humana.
Por lo general a mitad de mes me siento melancólica, y un poco triste y vacía... Pero mitad de mes es solo un día.

martes, 10 de noviembre de 2009

¿Que hay de nuevo viejo?

Ahora que Jalouin ya ha pasado, estamos oficialmente en navidad.
A mucha gente le hace ilusión tener animalitos, se los regalan por Reyes y normalmente la cosa acaba mal.
Yo tengo un conejo enano, familiarmente le llamamos Conejo, pero para los foráneos es el Sr Conejo. Es malvado y algún día dominara el mundo.
El caso es que la mayoría de historias que conozco de conejos son muy tristes, la gente se compra estos animales por que están de moda, por que son muy cucos, y por que son tan pequeños que parecen peluches y no necesitan nada. La cosa no es así, son animales realmente muy delicados de salud, necesitan ir al veterinario una vez al mes como mínimo para cortarse las uñas y revisarse, tienen el estomago delicado, también tienen los huesos muy frágiles, y son casi tan inteligentes como los perros, por eso necesitan mucha compañía y mimitos. La mayoría de la gente que compra un conejo no lo sabe, yo no lo sabia, es ahí cuando viene el drama, la gente los maltrata a menudo sin saberlo, cuando no obedecen los apartan, y para muchos como duermen en una jaula ni se molestan en dejarlos salir. Eso es cruel, y como he dicho, a menudo la gente es cruel con ellos sin saberlo. Por eso las historias de conejos que conozco suelen acabar mal, son animales que viven unos 8 años y la mayoría no pasan de los 2.

Por eso si estas pensando en comprar un conejo, piensa si podrás ocuparte de él, y mejor todavía infórmate o incluso adopta uno en una de estas webs:

Esta es la web de la Asociación Nacional de Amigos del Conejo, puedes adoptar, apadrinar, o donar, además tienen cositas para comprar por solo un euro.



La Madrigera, es un alberge de Madrid, funciona de la misma manera:


Y para acabar, algunos videos de interés:


jueves, 5 de noviembre de 2009

Aprender.

Como bien decía Olivia, todo pasa por una razón. No se si es el fatuo destino, un dios omnipotente, o todo fruto de la casualidad, pero al final todas las mantas vuelven a sus camas.
Aprender es algo que hacemos a lo largo de toda la vida. Aprender a tolerar, a querer, aprender simplemente, a vivir con la gente, con las cosas que te da la vida, e incluso con las que no te da.
Aprender que las pelis de Disney solo duran 90 minutos, pero que puedes vivir tu vida como te de la gana en realidad sin guiones y sin personajes secundarios, y eso no acaba nunca, lo haces como quieras tú. Aprendes que si al mirar al otro no suenan violines y aparecen arco iris esta bien, por que significa que eres consciente de que lo que tienes es real, aprendes que en esta vida no se necesita nada más. A veces la cosa va bien o a veces va mal, pero cuando aprendes de las cosas del pasado comprendes las cosas del futuro.
Eso es en definitiva aprender a ser feliz.

Esto para los que no sepan la historia de la manta de Olivia.

La Manta de Olivia:
Yo vivía con Olivia y con Rita. Olivia era una mujer muy mística, un día estábamos las tres tendiendo y la manta preferida de Olivia, que era una manta que tenia desde que era un bebe, se fue volando impulsada por una ráfaga de viento. La reacción de Olivia a esto fue decirnos que no pasaba nada, que aquello solo significaba que había llegado el momento de separarse de su manta, si no no hubiese salido volando, si no, pues ya volvería.
Vivíamos en un 8º, así que la manta salio volando muy alto, planeando por encima de los edificios de la ciudad, esa manta no tenia cara de querer volver.
El caso es que un día entrando las tres en casa, encontramos la manta dobladita en el portal. Había vuelto a casa. Estaba sucia y rota, pero estaba en casa otra vez.
Todo ocurre por una razón, aunque esta solo sea el echo de aprender a aprender. Y al final todo vuelve a como debió haber sido.