El otro día comiendo en un bar, a mi lado había una mesa de señores muy bien vestios con sus trajes, Hablaban de política. Se decian los unos a los otros que si realmente Camps había delinquido o no. Y digo "se decían" por que todos hablaban aparentemente entre ellos pero ninguno escuchaba a los demás. Finalmente se disponian a abandonar el local cuando uno de ellos, (el más joven, quizás de mi edad) ya de pie y abrochandose el botón de la americana dijo: "Mira, si Camps se hubiese quedado con los trajes ya no estaría ahí, lo habrían echado, pero ahí está". Todos los demás dieron el tema por zanjado y asintieron. Yo pense: "Amén".
A la hora dle cafe entré en otro bar. Al entrar pense que la música estaba muy alta y que había muy poca luz. Al mirar hacia la tele vi a Pavarotti cantando, de ahí la música alta. La mujer de detrás de la barra al verme entrar bajó el volumen. Le pedí un café, ella cojeando me lo puso y se apoyó en la barra a mi lado. Tristemente me contó que la cosa estaba muy mal, le dolian las piernas pero no se podía jubilar. Solo repetía "Esto yo asi no lo he visto en mi vida", y se sacuadía el delantal como el que intenta sacudirse las penas.
Al final, ya casi apunto de marcharme me dijo: "Mira si esto esta mal que no enciendo ni las luces, por que no me llega para pagar la factura". De ahí la oscuridad en el local.
Si la mujer triste del bar oscuro y musical no puede estar, pero está, ¿ Entonces no será lo mismo que le pasa a Camps?
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